Ir en el metro o en el autobús jugando un videojuego en el celular se ha transformado en un hábito para los gamers. Aunque la tradicional consola no pierde su reinado instalada al lado del televisor, en el último tiempo los dispositivos portátiles están comenzando a consolidarse como uno de los soportes preferidos para jugar videojuegos.
Dispositivos como smartphones, tablets o computadores se están convirtiendo progresivamente en consolas portátiles. Aplicaciones como Pokemon Go demuestran que lo móvil está cambiando la industria. Experto en videojuegos explica este giro en la forma de consumir estos juegos.¿Es el adiós definitivo a las consolas? “No, aunque ha habido un declive en las ventas, su consumo sigue estable. Ahora cada vez con menos dinero puedes tener un dispositivo que corra juegos más potentes. La industria en general va hacia la digitalización de contenidos y han sido los mismos celulares los que han impulsado esto”, indica el jefe de carrera de Animación Digital y Diseño de Videojuegos de la Universidad del Pacífico, Gonzalo Lara.
Según un estudio de este año de la consultora Newzoo, la venta de videojuegos para consolas está dominada por TV/Consola con un 29%, le siguen los PC/MMO con un 27%, los smarthphones con un 27%, las tablet con el 10% y los handheld con un 2%. En tanto, se calcula que para 2019 la industria móvil generará US$52.500 millones, monto equivalente al 45% de ese mercado global.
“Siempre va a haber un núcleo duro de jugadores que va a preferir jugar en consolas o en PC, pero hay todo un segmento más amplio de público que eventualmente emigró hacia un iPad, un iPhone o un Android. Está este abismo entre ambos campos, pero se está buscando formas de saltar eso e integrar todo, que al final sea la experiencia de jugar, y ése es el experimento y el intento que están haciendo todas las empresas día a día con las ofertas”, apunta Lara.
El avance de la tecnología en cuanto a celulares, principalmente por la calidad del chip, mayor definición de la imagen y resolución de la pantalla, y cantidad de memoria del aparato, ha ayudado a reemplazar el nicho que usaban las consolas portátiles como el clásico GameBoy, Nintendo 3DS o PlayStation Vita.
“Las principales ventajas relacionadas a jugar en celular van vinculadas a su portabilidad. Si bien aún no logran acercarse a videojuegos de consolas, tanto a nivel gráfico como de experiencias inmersivas, títulos como Pokemon Go muestran como hay un espacio de interconectividad que es más fuerte en celulares, precisamente por su movilidad, por lo que el rango de calidad gráfica juega más en su favor acá, donde no hay tantas expectativas creadas sobre cómo debe verse un juego, que si ocurre en la consola”, asegura el especialista de la U. del Pacífico.
De hecho, Nintendo, uno de los gigantes en la industria del videojuego, actualmente ya desarrolla por separado sus juegos para consola y para smartphone. El primer juego para celulares que lanzó fue “Miitomo”, que fue un éxito de descargas en Japón, tanto en plataformas Apple como en dispositivos Android en sus primeras semanas. En diciembre estrenará Super Mario Run, popular juego de la empresa que llegará a los celulares inteligentes y se prevé que 1.500 millones de usuarios lo descarguen.
“Nintendo está entendiendo que más que ser una amenaza directa, puede usar la masificación que entregan los dispositivos móviles como puerta de entrada para acercar sus propios productos a un mercado nuevo, dejando la puerta abierta para que, si quieren la experiencia de mayor profundidad, ocupen sus consolas, enfoque que está siendo adoptado por otras empresas”, explica Lara.
Aun así, las clásicas consolas se resisten a morir, ya que buscan mantenerse en el mercado ofreciendo otro tipo de experiencia y de juegos. “El aspecto gráfico sigue siendo el principal diferenciador, al igual que el producto en consola/PC tiende a ser de mejor factura técnica en términos de profundidad. Además, las mismas consolas se han ido adaptando a los cambios de mercado, facilitando la reproducción multimedia en forma de Apps, pero también el compartir contenido, integrando plataformas de streaming dentro de las operaciones, compartiendo mejores momentos o transmisiones en vivo de lo que se está jugando“, apunta el director de la Escuela de Animación Digital y Diseño de Videojuegos, Gonzalo Lara.