La comprensión de materias científicas representa un desafío. En ese sentido, la neurociencia se destaca como un campo multidisciplinario que exige conocimientos generales para comprender sus conceptos con mayor profundidad. En el caso de los alumnos de Educación Especial, la mayoría proviene de una formación humanista y la integración de herramientas de Inteligencia Artificial (AI) en la enseñanza podría facilitar su aprendizaje.
Al respecto, la Escuela de Pedagogía de la PUCV se adjudicó este año el proyecto de la Vicerrectoría Académica titulado "Inteligencia Artificial como un ayudante para enriquecer el pensamiento crítico de los estudiantes en un ramo de neurociencias de primer año", iniciativa que es liderada por la académica Sandra Catalán en conjunto con el profesor Juan Ahumada.
La idea es intencionar el uso de la IA para la búsqueda y análisis de información y contenido asociado a temas de neurociencia. Queremos implementar el uso de la tecnología para que, justamente los estudiantes puedan indagar información y generar el proceso de retroalimentación, pero constatando que los antecedentes sean verídicos.
El objetivo de utilizar este tipo de plataformas es que los futuros profesores y profesoras puedan contrastar el saber con otras herramientas tecnológicas que les permita sondear en fuentes de referencia bibliográfica como son Microsoft Bing o Humata IA que, además de dar respuestas, entregan el origen de la información.
Esta información, luego, debe ser relacionada con lo analizado en clases y con las fuentes de referencia que proporcione el docente, en este caso, el profesor Juan Ahumada.
Oportunidad de aprendizaje
Cada año, los académicos y académicas de la PUCV se han percatado que los estudiantes ocupan más las tecnologías. Por lo mismo, el objetivo de implementar esta asignatura es que se acompañe a los estudiantes para favorecer un uso educativo de estas herramientas.
Lo mismo pasa con el celular y las redes sociales, existen otros usos que pueden ser más positivos y formativos. La idea no es estar en contra de la tecnología, sino que hacerla aliada de nuestro trabajo académico, pero siempre guiando el proceso para que ellos sean capaces de identificar información real v/s información falsa que no tiene sustentos teóricos o empíricos.
La iniciativa está pensada para comenzar a aplicarse en 2024 para alumnos de primer año y durante este segundo semestre se efectuarán una serie de modificaciones respectivas al syllabus, incorporando nuevas estrategias de aprendizaje.
Avances en neurociencia
La académica explicó que es muy importante que los alumnos de Educación Especial conozcan del desarrollo neurobiológico porque en su desempeño profesional apoyarán a estudiantes en dos áreas; aquellos que presentan dificultades de aprendizaje y quienes tienen discapacidad intelectual.
Estas condiciones tienen un sustrato neurobiológico relevante. Si los estudiantes no son capaces de acceder a este conocimiento, reflexionar y entenderlo, será muy difícil seleccionar estrategias metodológicas que puedan responder a las necesidades específicas que ellos y ellas presentan, como tampoco mediar para generar modificaciones en el contexto que propicien su aprendizaje.