Cerca de dos mil 400 aves llegaron a embellecer y colorear la Reserva Nacional El Yali de Santo Domingo, de acuerdo al último censo realizado por guardaparques de la Corporación Nacional Forestal (CONAF).
Los trabajos, que culminarán el 31 de agosto de este año, contemplan la construcción de sombrillas y cercos ornamentales, además de la instalación y reparación de mesas-banca.
Tras las precipitaciones registradas entre los meses de mayo y julio, las lagunas Colejuda y Matanza volvieron a acumular agua, luego de casi dos años de sequía. Esto ha posibilitado el retorno de especies como flamencos chilenos, cisnes de cuello negro y coscoroba, taguas y patos gargantillo.
Los amantes de la ornitología y la vida silvestre, sin embargo, aún no han podido apreciar in situ este nuevo y hermoso escenario natural, debido a que esta área protegida se mantiene cerrada al público desde el 18 de marzo pasado, como medida preventiva frente a la pandemia del coronavirus.
No obstante, con estrictas medidas de seguridad sanitarias, el personal de CONAF continúa trabajando en el mejoramiento de la infraestructura del recinto, que próximamente podría abrir sus puertas a la comunidad.
Es así como, durante el mes de junio pasado, comenzó la remodelación de la zona de merienda fría, un atractivo espacio de descanso y alimentación para los usuarios de la unidad.
Al respecto, el director regional de CONAF, Sandro Bruzzone, destacó que “este trabajo, que culminará el 31 de agosto, contempla la construcción de sombrillas y cercos ornamentales, además de la instalación y reparación de mesas-banca, con una capacidad de carga total de 35 personas”.
“En la zona de merienda fría, que posee una superficie de 100 metros cuadrados, los usuarios podrán apreciar el paisaje que rodea al sector de administración, a las aves que sobrevuelan los diferentes árboles y arbustos, protegidos de las altas temperaturas y la radiación solar en época primaveral y estival”, añadió.
Por su parte, el guardaparques y administrador de la reserva nacional, Eduardo Riquelme, detalló que “la remodelación, que se lleva a cabo con material reciclado y almacenado de temporadas pasadas, busca hacer más amigable el entorno y ofrecer un área de mayor comodidad para las personas que nos visitan”.
A su vez, resaltó que, durante el período de cierre preventivo de la unidad, “los guardaparques hemos realizado censos de aves, educación ambiental online y trabajos de mejoramiento de infraestructura y mantención de letreros de señalización, miradores, senderos, cercos, puentes y estaciones”.
Cabe recordar que, para prevenir posibles incendios forestales, la Corporación prohíbe el uso del fuego en el entorno protegido.