Creado el 16 de enero del año 1935, el Parque Nacional Archipiélago Juan Fernández —que abarca a las islas Santa Clara, Alejandro Selkirk y la mayor parte de Robinson Crusoe— cumple este sábado 86 años de vida.
Esta área silvestre protegida del Estado, administrada por la Corporación Nacional Forestal (CONAF), posee una superficie de nueve mil 571 hectáreas, que albergan un valioso patrimonio de flora y fauna.
En cuanto a la vegetación, por ejemplo, resaltan 137 especies endémicas y 213 nativas. También la presencia del lobo fino (Arctophoca philipii philipii) y el picaflor de Juan Fernández (Sephanoides fernandensis), especies emblemáticas y exclusivas del archipiélago.
Para el director regional de CONAF, Sandro Bruzzone, “durante los últimos años, diferentes hitos han marcado las labores de conservación dentro del parque, como la creación del primer banco de semillas y laboratorio de germinación, que registra casi el 60 % de las especies endémicas de Robinson Crusoe; el redescubrimiento de dos plantas que se creían extintas: la Robinsonia berteroi y el Chenopodium nesodendron; la instalación de cámaras-trampa para monitorear el comportamiento y las amenazas de la avifauna nativa y endémica; la erradicación del conejo europeo en la isla Santa Clara; y, en general, el desarrollo de proyectos para el control de especies exóticas invasoras, con servicios y las ONG Oikonos y Island Conservation”.
Asimismo, destacó la conformación de la brigada forestal “Chonta”, que operará en la prevención y combate de incendios forestales, por tercer año consecutivo, en el archipiélago, lo cual es muy relevante dado el incremento de la población en la interfaz urbano-forestal”.
Amenazas
Por su parte, el administrador del parque nacional, Guillermo Araya, advirtió que “a pesar de ser un territorio con un ecosistema único en el mundo, reconocido por la cantidad de especies endémicas por superficie, está considerado dentro de las diez ecorregiones con mayores amenazas a nivel mundial, debido a las actividades y eventos provocados desde la llegada del ser humano, donde han existido incendios forestales, tala de especies endémicas llegando a la extinción de ocho especies, de las cuales dos se redescubrieron por personal de guardaparques”.
“En la actualidad, un hecho que cobra gran relevancia sobre la conservación de la flora y fauna nativa, ha sido la introducción de especies vegetales exóticas. El número de especies exóticas naturalizadas o en vías de naturalización representa más del 59% del total de plantas vasculares en el archipiélago de Juan Fernández (Danton y Perrier, 2006), especialmente la Aristotelia chilensis (maqui), Rubus ulmifolius (zarzamora) y Ugni molinae (murta), dejando en peligro la rica y frágil biodiversidad del archipiélago”, añadió.
Finalmente, Araya llamó a la comunidad a “seguir aportando con la conservación y realizando actividades de manera responsable al interior del parque, resaltando la importancia de la prohibición del uso del fuego para evitar una catástrofe que destruya este lugar único en el planeta, respetando la flora y fauna y su hábitat del cual somos afortunados de poder disfrutar en nuestro entorno pensando en las actuales y futuras generaciones”.