Se trata de una de las mayores preocupaciones de la comunidad, desde que se conoció el proyecto de ampliación de la Ruta F 20 Nogales-Puchuncaví, por el temor al daño ambiental y la afectación tanto a los bosques de especies protegidas, como el Tayú del Norte, árbol nativo en peligro de extinción considerado como un verdadero fósil viviente, sino que también por los efectos que podría tener el trazado en las vertientes sector y sobretodo en el humedal y todos los animales que allí coexisten.
El proyecto del Ministerio de Obras Públicas considera la ampliación a dos pistas, pero no estipula medidas para impedir los impactos a las vertientes de localidades como Pucalán o Los Maquis ni las alteraciones que podía sufrir el humedal Maitenes-Campiche, que ya está rodeado de un concentrado cordón industrial.
Todos elementos que motivaron un trabajo especial para brindar una protección legal a la superficie, lo cual tuvo resultados este lunes, cuando el Ministerio de Medio Ambiente publicó en el diario oficial el reconocimiento como Humedal Urbano a las 500 hectáreas del humedal Los Maitenes - Campiche, además de los humedales de Quirilluca Norte y Sur, decisión que fue aplaudida por el alcalde de Puchuncaví, Marcos Morales.
"Representa un tremendo triunfo para nuestra comuna, porque el trazado original de la carretera Nogales Puchuncaví y especialmente la proyección de su variante Ventanas, contemplaba intervenir este ecosistema sumamente delicado, además de otros proyectos de gran riesgo que se han intentado proyectar sobre esta área, como acueductos o líneas de transmisión eléctricas, definitivamente van a quedar sepultados, porque a partir de este reconocimiento, cualquier iniciativa que se quiera realizar en el sector, implicará necesariamente pasar por un Estudio de Impacto Ambiental, lo cual no era obligatorio realizar hasta el día de hoy", sentenció la máxima autoridad comunal.
El alcalde agregó que con esta medida se deja claro que Puchuncaví merece un desarrollo mucho más armonioso con el medioambiente, el turismo y la calidad de vida.
"Las hectáreas que hemos logrado proteger, representan una extensión de terreno que supera en su totalidad el área del cordón industrial que actualmente tenemos instalada en nuestra comuna. Hoy, queremos volver a decir de forma fuerte y clara que en Puchuncaví, no necesitamos más proyectos de este impacto, que atraviesan por el centro de un pueblo, generen molestia en la comunidad y dañan el ecosistema", puntualizó Morales.