Las historias del conocido “cuento del tío” aumentan en esta época del año considerando la gran cantidad de personas que se aleja por unos días de sus familiares con la finalidad de disfrutar unas merecidas vacaciones.

Ser ejecutivos bancarios, de compañías de telefonía móvil, de alguna operadora de televisión por cable, o directamente familiar, son parte de los variados recursos que los antisociales utilizan para engañar a sus víctimas, ganar su confianza y así apropiarse de dinero o especies.

Según fuentes de la Policía de Investigaciones de Chile el delito ha ido variando en el tiempo, lo que partió con el modus operandis en que los delincuentes se hacían pasar por un miembro de un programa de televisión para dar a conocer a las personas que eran ganadores de un premio, varió a estafas con las tarjetas de prepago, accidentes de tránsito e incluso secuestros.

La Brigada de Investigación Criminal Quilpué, a través de su departamento de análisis criminal, ha detectado que en la zona existen grupos que se encuentran operando mediante estos engaños, por lo tanto se encuentran haciendo un llamado al autocuidado.

Además, la policía civil indicó que durante 2013 se recibieron 333 casos, los que se vieron duplicadas en 2014 a 635, a partir de esto, la institución policial pretende que la gente tome conciencia y se atreva a denunciar, que se acerquen a los cuarteles, ya que es la única forma de poder investigar y obtener resultados positivos en este tipo de estafas.

Recomendaciones:

  • Identificar a quien llama. Preguntar el nombre completo, cargo y lugar de trabajo de la persona que llama y pedirle un teléfono de red fija para verificar la información entregada.
  • Reservar datos personales. Antes de acreditar los datos del punto anterior, no entregue datos personales y, por supuesto, no compre tarjetas solicitadas ni menos entregue los números secretos de las mismas.
  • Personas hábiles, pero sin datos seguros. Recuerde que las estafas telefónicas son realizadas por personas con la habilidad para poder obtener sus datos, pero no tienen su nombre, dirección ni conocen a su grupo familiar. Lo que saben es lo que Usted les revela en la conversación. Del mismo modo, evite publicar datos personales en las redes sociales o sitios de compra y venta de bienes.
  • Informe a su entorno. Es importante que eduque a su núcleo familiar y empleados para que no caigan en estos fraudes y sean capaces de detectar estas situaciones e informar a la familia o a la policía.
  • Evite poner en riesgo su integridad a su familia. Si enfrenta uno de estos llamados, limítese a informar a la policía y no vaya al encuentro de los estafadores cuando sean detectados.
  • Guarde los comprobantes. Nunca rompa los comprobantes de depósitos bancarios o de compras realizadas ya que pueden ser un importante medio de prueba en una investigación.
  • Pida colaboración a la persona más cercana. Una de las características de este tipo de llamadas es que el estafador mantiene a su víctima permanentemente al teléfono. Por ello, se recomienda pedir a una tercera persona que se encuentre cerca de nosotros que llame a la policía o a la persona supuestamente afectada por un accidente o secuestro y corrobore que se encuentra en buenas condiciones.